viernes, 16 de diciembre de 2011

Carta al PP

Puede que la mayoria de personas, no ciudadanos ni ciudadanas de este país, se hayan acostumbrado a la violencia machista, que piensen que es algo ajeno a ellos y a ellas. Pues he de darles una mala noticia, no es así. A ustedes, nuevos dirigentes de este país, parece que les está preocupando mucho más el ahorro que la protección a mujeres que han vivido un verdadero infierno, tanto ellas como sus hijos. Obviamente, se que les es ajeno pero no por ello deberian dejar de preocuparse de ellas. ¿Alguno de ustedes ha sufrido en su propia familia la violencia machista?, me imagino que no. Ya que si fuera de otra forma, no actuarian como están pensando. Tengo claro que defienden la familia, "su modelo de familia". Que sepan no es el único ni el más válido, es preferible vivir sola con nuestros hijos que vivir con miedo. Ninguna mujer, ni mucho menos los hijos e hijas, han de sufrir esta situación de miedo y amenazas, provocando verdaderas situaciones de humillación y terror. Como ciudadana responsable y ex víctima de violencia machista, no me da ninguna verguenza admitirlo, he de decir que me niego a dejar de luchar por estas mujeres. No tendrán mi silencio, no pienso mirar para otro lado y mucho menos dejar de denunciar su miserable actitud. Hombres y mujeres debemos dejar que se escuche nuestra voz y les aseguro que esta carta les llegará a su sede. Espero que mi grito no sea una simple grito en el desierto y que seamos muchos ciudadanos y ciudadanas las que luchemos contra el asesinato, chantaje, amenazas y tortura a mujeres cada minuto del dia en cada pueblo y ciudad de nuestro país. Espero que mi carta no sea la única que les llegue, que les inundemos con nuestra desaprovación y rabia por dejar solas a mujeres, niños y niñas que sufren o han sufrido. Desde la educación, no puedo evitar decirles que su simple pensamiento de cerrar las casas de acogida es una verdadera actitud miserable. Y por ello, desde mi posición pido a todos los ciudadanos y ciudadanas que les inunden de reprobación y desprecio. El mio lo tienen asegurado

domingo, 11 de diciembre de 2011

Me niego a ser cómplice

Hay determinados momentos en la vida que pararse y decir basta es la única opción posible, sobre todo para algunas personas. Ese es mi caso en este momento, la gota ya ha derramado el vaso y la verdad me niego a ser cómplice con mi silencio de la amputación sistemática que lleva sufriendo la cultura desde hace ya algún tiempo en nuestro país. La cultura está agonizando, sufriendo una muerte mucho más brusca de lo esperado. Todo ello, gracias a una serie políticos que no saben ni lo que significa y mucho menos les interesa saberlo. Pero no sería justo culpar a "esas mentes pensantes" tan poco lúcidas en muchas ocasiones Los ciudadanos silentes son igual de responsables, y lo peor del caso es que no saben o quizás no quieren saber que están siendo utilizados. Desde los mas antiguos confines de la historia, a los malos gobernantes solo les quedaba la opción de la manipulación de sus súbditos que no ciudadanos. A nadie se le escapa que acatar mediante silencios cómplices o simplemente permanecer distraídos de la realidad es una forma de facilitar la labor destructiva de algunos políticos. La distracción es un elemento utilizado desde muy antiguo, lo que no por ello le debería hacer desconocido. La cultura, independientemente de la existencia o no de crisis económica, ha sido siempre muy incómoda para los gobernantes. No es fácil gobernar un pueblo culto y por ende con capacidad de crítica y pensamiento,lo cómodo es distraer al personal con "Pan y Toros" como decía mi ilustre paisano Jovellanos. Ya que la dotación de información, capacidad de pensamiento, crítica constructiva y libre no es muy interesante para las mentes pensantes de este país y teniendo en cuenta que estamos en crisis creo obligado recordar para algunos y señalar para otros la cantidad de puestos de trabajo directo e indirecto que genera las diferentes manifestaciones culturales. La cultura cotiza en la economía de un país dando riqueza monetaria, espiritual y mental. Uno de los grandes problemas, aunque este es común en varios sectores económicos, es la falta de unión y organización para reclamar y luchar por lo que es nuestro. Los distintos sectores que viven y se desarrollan gracias a las industrias y eventos culturales quizás han asumido que son la sobrina pobre de la familia, la cenicienta de un cuento de nunca acabar. Pues creo que ha llegado el momento de levantarse y demostrar que somos muchos los que vivimos, disfrutamos y sentimos la cultura como necesaria para el desarrollo de nuestra sociedad. También son muchos los que tienen derecho a luchar por nuestros puestos de trabajo: artistas, músicos, editores, escritores, escenógrafos, directores, productores,......Pero así mismo también es necesario que el turismo, la hostelería, los periodistas ...... sepamos que nuestro trabajo también peligra. Es hora de analizar y pensar, de remar en una misma dirección. Pero lo que si tengo claro es que yo me niego a ser cómplice de una muerte que no deseo y mi silencio no ayudará a ello jamas.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Los toros desde la barrera

Las últimas elecciones generales han hecho que el PSOE pase a ver los toros desde la barrera. No ha sido nada nuevo ni sorprendente. El resultado era esperado. Ahora llega el momento de "afilar cuchillos" para algunos en base al número de escaños obtenidos. Otros pensamos que es el momento de ser justos, que aparezca la autocrítica pero siempre de forma constructiva, ya que de otra manera no serviría para nada. En todas las facetas de la vida cuando se toca fondo solo queda volver a construirse y crecer con cimientos fuertes. Esta situación no debería ser muy diferente de lo que ha de ocurrirle al PSOE. Obviando la situación mundial a la que nos ha llevado la crisis, una de las razones por la que los ciudadanos acusaron al gobierno bajo los subterfugios nada limpios de los que antes eran oposición, toca analizar los fallos de una organización centenaria. La endogamia vista por alguno de nosotros desde hace tiempo es uno de los principales factores que alejan al PSOE de la realidad ciudadana, del dia a dia de las personas que intentan construir un futuro. En los pequeños comercios, en las oficinas, en los bares, en la calle están las respuestas que no se encuentran en los despachos. Estas últimas suponen, en la mayoria de los casos, alejarse de una realidad que te puede arrinconar. Es hora de entender que la sociedad es dinámica y cambia sin solución de continuidad. Adaptar el discurso a los nuevos momentos, necesidades y avances de la misma es la única forma de volver a resurgir de unas cenizas que ahora algunos aprovecha para encender un fuego quien sabe si incendiario aunque en mi modesta opinión creo que no. Se hace necesario entender que la gran mayoria de los ciudadanos y ciudadanas de este país son trabajadores pero se impone tambien acercar el discurso a los diferentes estratos de la sociedad de una forma clara y comprometida. Escuchar es una gran virtud muy poco utilizada en el dia a dia y fundamental en los políticos. Ahora llega el momento de ponerlo en práctica, aunque obviamente no puedo ocultar que me hubiese encantado poder haberlo visto hace más tiempo. Quizás llega el momento de tener al lado los profesionales más válidos en cada sector aprendiendo de sus experiencias y vivencias, entender que ser político es dedicarse al servicio público, de todos los ciudadanos. Poder tener libertad para expresar las opiniones confrontando con madurez e inteligencia los diferentes puntos de vista. La transparencia sin cortapisas ha de implantarse como un mecanismo de debate de ideas y propuestas. Para llevar a cabo todo este cambio de una forma real se impone observar y escuchar, pensar y opinar. ¿Alguien ve otro camino de crecer o mejor dicho de renacer?, yo desde luego no.